El cáncer de mama metastásico en los huesos se refiere al cáncer que se origina dentro del tejido mamario, pero que se disemina a los huesos. El médico también puede referirse al cáncer de mama en los huesos como cáncer de mama avanzado o cáncer de mama etapa 4, secundario o distante.
El cáncer de mama es el segundo cáncer más común en las mujeres, y también puede afectar a los hombres. Cuando se desarrolla el cáncer de mama, se puede propagar a varias partes del cuerpo, a lo que los médicos llaman metástasis. Algunos sitios comunes para la metástasis del cáncer de mama son los huesos, el cerebro, los pulmones y el hígado.
Un diagnóstico de cáncer de mama metastásico en los huesos puede ser preocupante. Sin embargo, con el cuidado apropiado, las personas pueden mantener una buena calidad de vida.
En este artículo hablamos el cáncer de mama metastásico en los huesos, incluyendo las causas, el diagnóstico y las opciones de tratamiento. También consideramos el pronóstico para las personas con la enfermedad.
El cáncer metastásico es un cáncer que se ha propagado más allá de su sitio inicial a otras partes del cuerpo. En muchos casos, los médicos se refieren al cáncer metastásico como cáncer en etapa 4.
En las personas con cáncer de mama, se desarrolla un tumor metastásico cuando las células cancerosas se desprenden del seno y se unen en una parte diferente del cuerpo.
Las células se pueden propagar a diferentes áreas del cuerpo, dependiendo del tipo de cáncer. Los lugares donde usualmente aparece el cáncer de mama metastásico son:
- huesos
- pulmones
- cerebro
- hígado
Los huesos son la parte del cuerpo en donde más comúnmente se forman tumores metastásicos de cáncer de mama. Cualquier tipo de cáncer se puede propagar a los huesos, pero el 80 por ciento de las metástasis óseas provienen del cáncer de mama, cáncer de próstata o cáncer de pulmón.
Las metástasis del cáncer de mama se pueden formar en cualquier parte del esqueleto, pero el cáncer generalmente se propaga a los huesos en la:
- columna
- costillas
- pelvis
- brazos
- piernas
Los tumores metastásicos se pueden desarrollar en los huesos antes de que una persona incluso tenga conocimiento de que tiene cáncer de mama. Por otro lado, los tumores metastásicos podrían no formarse hasta años después de que una persona reciba tratamiento para el cáncer de mama.
El cáncer metastásico en los huesos puede conducir a una disminución en la calidad de vida de una persona, y puede ser fatal. Sin embargo, algunas personas siguen viviendo una vida plena y larga después del diagnóstico.
La perspectiva de una persona varía dependiendo de:
- cuánto se ha propagado el cáncer
- si las personas experimentan eventos relacionados con el esqueleto, como fracturas óseas o compresión de la columna vertebral
- si las personas usan tratamiento para reducir los tumores
Algunos estudios sugieren que la tasa promedio de supervivencia a 1 año para las personas con cáncer óseo metastásico es de 40 por ciento a 59 por ciento. Sin embargo, la Sociedad Americana Contra el Cáncer (ACS, por sus siglas en inglés) afirma que las personas con cáncer de mama distante tienen 28 por ciento de probabilidades de vivir por lo menos otros 5 años, como aquellas que no tienen esta afección.
Un estudio realizado en 2017 en personas en Dinamarca sugiere que la tasa de supervivencia de 1 año entre personas con cáncer óseo metastásico es ligeramente mayor, con 51 por ciento, cuando el cáncer comenzó en el seno que cuando se originó en los pulmones o la próstata. Los autores del estudio indican que la mayoría de las personas vive de 12 a 33 meses después de un diagnóstico de cáncer metastásico en los huesos.
Cuando el cáncer de mama hace metástasis, hace que las células tumorales crezcan y formen estructuras disruptivas en los huesos.
La remodelación ósea, en la que el tejido óseo nuevo reemplaza el tejido óseo viejo para mantener el cuerpo fuerte, es un proceso importante que ocurre a lo largo de la vida de una persona.
El cáncer metastásico en los huesos afecta el proceso de remodelación ósea. Los tumores que se desarrollan en los huesos pueden ser osteolíticos, lo que significa que reducen el tejido óseo u osteoblástico, lo que causa una sobreproducción ósea.
Los síntomas de metástasis de hueso pueden incluir:
- dolor de huesos
- fractura por debilidad ósea
- compresión nerviosa
Si una persona está experimentando síntomas y cree que podría tener metástasis ósea, debe comunicarse con el médico para obtener un diagnóstico.
Los médicos suelen utilizar al menos una tomografía por imágenes cuando evalúan la metástasis ósea. Las posibles tomografías por imágenes incluyen:
- tomografía por resonancia magnética (RMI)
- tomografía computarizada (TC)
- tomografía por emisión de positrones (TEP)
- radiografías
- gammagrafía ósea
La metástasis ósea puede hacer que aumenten los niveles de calcio y fosfatasa alcalina (ALP). Por lo tanto, el médico puede hacer un análisis de sangre para detectar niveles más altos de lo habitual.
Además, una biopsia puede ayudar a determinar si una persona tiene la afección. En este caso, con la guía de una tomografía computarizada, el médico usará una aguja para recoger una muestra de tejido del área potencialmente cancerosa del hueso. Los técnicos de laboratorio analizarán la muestra en busca de señales de cáncer.
La metástasis ósea casi siempre es incurable. Por lo tanto, las opciones de tratamiento usualmente se centran en controlar el cáncer al reducir o detener su crecimiento, así como minimizar los síntomas a través de cuidados paliativos.
El objetivo del plan de tratamiento determinará las opciones de tratamiento de una persona.
Algunas personas pueden usar medicamentos para fortalecer los huesos, que incluyen pamidronato, ácido zoledrónico y denosumab. Estos medicamentos pueden ayudar al:
- reducir la probabilidad de eventos relacionados con el esqueleto, como fracturas
- aliviar el dolor
- reducir la necesidad de otras opciones de tratamiento, como la quimioterapia
Otras opciones de tratamiento incluyen:
- quimioterapia
- radioterapia
- terapia hormonal
- cirugía
- medicina complementaria u holística
Algunas veces, las personas ingresan a estudios clínicos cuando están explorando opciones de tratamiento, ya que pueden encontrar oportunidades que aún no están disponibles en general.
El tipo y la gravedad de los síntomas que experimenta una persona dependen del tamaño de los tumores metastásicos y del lugar donde se encuentran dentro del cuerpo.
Algunas personas pueden optar por agregar medicina complementaria y holística a su plan de tratamiento y usar métodos como acupuntura, meditación e hipnosis.
Estas técnicas pueden reducir la gravedad de los síntomas de una persona y mejorar su calidad de vida, pero no deben sustituir al tratamiento médico. Si una persona decide usar dichos métodos, debe informar a su médico.
Tener cáncer puede causar una serie de emociones, pero nadie tiene que pasar solo por esto. El apoyo está disponible en forma de consejería, grupos de apoyo, clínicas para el dolor y más. Un médico puede ofrecer a una persona asesoramiento sobre las opciones en su área local.
El cáncer de mama se puede propagar a los huesos a través del proceso de metástasis. La metástasis ocurre durante el cáncer en etapa 4, pero puede ocurrir en cualquier momento desde que una persona se da cuenta por primera vez que tiene cáncer de mama hasta años después de su recuperación.
Existen tratamientos disponibles para controlar y reducir el cáncer y aliviar los síntomas. Estos pueden prolongar y mejorar la calidad de vida de una persona con metástasis óseas y pueden permitirles vivir una vida larga y productiva.
Traducción al español por HolaDoctor.
Edición en español el 23 de abril de 2022.
Versión original escrita el 14 de mayo de 2021.
Última revisión médica realizada el 14 de mayo de 2021.