La colitis ulcerosa es una forma de enfermedad inflamatoria intestinal que causa inflamación en el intestino grueso.

Por lo general, afecta a personas de entre 15 y 30 años, o de más de 60 años, pero puede desarrollarse a cualquier edad, incluso en la infancia.

La colitis ulcerosa causa hinchazón, sangrado, diarrea y otros síntomas incómodos. No tiene cura, pero varios tratamientos pueden ayudar.

En este artículo, conoce más sobre la colitis ulcerosa en niños, incluyendo los síntomas y las opciones de tratamiento, y cómo ayudar a un niño a sobrellevarla.

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La genética puede jugar un papel en la colitis ulcerosa infantil.

Se desconoce la causa exacta de la colitis ulcerosa en niños.

Sin embargo, los expertos creen que puede comenzar cuando una bacteria o un virus desencadena una reacción inflamatoria en el colon.

La colitis ulcerosa también puede ser hereditaria, lo que significa que puede haber un vínculo genético. Muchos niños con la afección también tienen un familiar cercano que la tiene.

Factores de riesgo

La colitis ulcerosa puede desarrollarse en cualquier persona. Sin embargo, según el Instituto Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales (NIDDK, por sus siglas en inglés), es más común en personas que:

  • tienen entre 15 y 30 años
  • tienen 60 años o más
  • tienen un familiar con colitis ulcerosa u otra forma de enfermedad inflamatoria intestinal
  • son de ascendencia judía

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La colitis ulcerosa puede causar dolor de estómago.

Los niños con colitis ulcerosa pueden experimentar una variedad de síntomas, que pueden variar en gravedad de leves a severos. Los síntomas suelen estar relacionados con la inflamación.

Al igual que los adultos, los niños con colitis ulcerosa pasarán por períodos de remisión con pocos o ningún síntoma. Estos típicamente preceden a los brotes, cuando los síntomas regresan.

Los síntomas pueden incluir:

  • dolor de estómago
  • diarrea con sangre
  • pérdida de apetito
  • pérdida de peso
  • fiebre
  • fatiga
  • pérdida de líquidos corporales y nutrientes
  • sangrado rectal
  • anemia

Algunos niños también experimentan síntomas que no parecen relacionados con su sistema digestivo. Estos pueden incluir:

  • dolor de articulaciones
  • sarpullidos
  • lesiones en la piel
  • Inflamación ocular
  • trastornos hepáticos
  • problemas renales
  • osteoporosis

Además de producir síntomas físicos en los niños, la colitis ulcerosa puede afectar su salud mental.

Los niños con esta afección pueden experimentar:

  • ira
  • cambios de humor
  • sentirse diferentes
  • sentirse vulnerables
  • frustración
  • estrés

También pueden tener problemas en la escuela, como:

  • vergüenza
  • burlas y acoso
  • presión de grupo con respecto a los alimentos que comen
  • cambios en la resistencia física
  • cambios en la concentración

Los niños podrían tener dificultades para explicar todos sus síntomas. El médico escuchará atentamente, llevará a cabo un examen físico y posiblemente realizará una variedad de pruebas para determinar si el niño tiene colitis ulcerosa.

Estas pruebas pueden incluir análisis de sangre, que pueden detectar niveles altos de glóbulos blancos, lo que indica problemas del sistema inmune, y niveles bajos de glóbulos rojos, lo que significa anemia.

Otras pruebas para la colitis ulcerosa en niños pueden incluir:

  • análisis de muestras de heces para buscar bacterias, parásitos y presencia de sangre
  • una colonoscopia, que es un tipo de endoscopía
  • un enema de bario
  • una biopsia

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Un médico puede recomendar cambios en la dieta para reducir el riesgo de brotes de colitis ulcerosa.

No hay cura para la colitis ulcerosa, pero hay tratamientos disponibles para ayudar a reducir los síntomas y mantener la enfermedad en remisión.

El tratamiento que el médico recomienda dependerá de:

  • la edad del niño
  • su salud e historial médico
  • el grado de la enfermedad
  • la tolerancia del niño a la medicación, los procedimientos médicos y las terapias
  • las preferencias y opiniones de los padres o cuidadores

Los métodos de tratamiento pueden incluir:

  • medicamentos, incluyendo fármacos biológicos y otros que afectan al sistema inmunitario
  • antibióticos, si existe un riesgo de infección
  • cambios en la dieta
  • hospitalización
  • cirugía

La investigación sugiere que entre el 5 y el 29 por ciento de los niños posiblemente necesiten cirugía para extirpar parte del colon.

Apoyo

El tratamiento no se limita a tratar los síntomas físicos. Es vital ayudar a un niño a lidiar con su afección abordando los cambios emocionales, sociales y familiares que se presentan.

Las maneras de ayudar a un niño a manejar su diagnóstico incluyen:

  • educar a sus seres queridos, amigos y maestros sobre la enfermedad y su tratamiento
  • obtener consejos de un nutricionista para asegurarse de que el niño está recibiendo suficientes nutrientes
  • llevarlos a ver a un terapeuta
  • encontrar apoyo en grupos

En algunas zonas, hay campamentos de verano y otras actividades diseñadas especialmente para niños con enfermedad inflamatoria intestinal. Estos programas proporcionan a los niños el apoyo médico que necesitan. Un niño también puede encontrar útil hablar con otros niños que están lidiando con síntomas similares.

La colitis ulcerosa es una afección crónica. Un niño tendrá la enfermedad por el resto de su vida, pero experimentará períodos de remisión entre brotes.

Aunque no hay cura, el tratamiento puede ayudar a los niños a manejar los síntomas. En algunos casos, podrían requerir cirugía.

Para ayudar a cuidar el bienestar general de un niño con colitis ulcerosa, es esencial que los padres o cuidadores aborden los posibles cambios emocionales y sociales que ocurren junto con los síntomas físicos.

Lee el artículo en inglés.

Traducción al español por HolaDoctor.

Edición en español por Stella Miranda el 5 de julio de 2021.

Versión original actualizada el 22 de septiembre de 2020.

Última revisión médica realizada el 22 de septiembre de 2020.