Los alimentos y las bebidas afectan directamente los niveles de glucosa en la sangre. Esto significa que las opciones dietéticas son especialmente importantes para las personas con diabetes.

Muchas personas comienzan el día con una taza de café y varios estudios han reportado que beber café podría reducir el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.

Esto ha llevado a algunas personas con diabetes a preguntarse si el café o posiblemente la cafeína pueden ser beneficiosos.

El café contiene muchos productos químicos además de la cafeína y, según una investigación actual, parece que algunos tienen efectos beneficiosos, mientras que otros tienen efectos menos positivos.

En este artículo se analizan las investigaciones científicas sobre los efectos del café en la diabetes y el riesgo de padecerla.

A young person prepares coffee in a grinder and wonders how coffee affects their diabetes.Share on Pinterest
Crédito de la imagen: Cavan Images/Getty Images

El café contiene muchos productos químicos que tienen diferentes efectos en el cuerpo, incluyendo cafeína y polifenoles.

Los polifenoles son moléculas con propiedades antioxidantes que se cree ayudan a prevenir una amplia gama de enfermedades, incluyendo diabetes tipo 2, enfermedades del corazón y cáncer.

Los antioxidantes ayudan a mantener el corazón sano. Las personas con diabetes tienen un mayor riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares y, comer muchos alimentos que contengan antioxidantes puede ayudar a reducir este riesgo.

El café también contiene los minerales magnesio y cromo. El aumento del consumo de magnesio se ha relacionado con tasas más bajas de diabetes tipo 2.

Sin embargo, el café contiene cantidades muy pequeñas de estos nutrientes, en comparación con otros alimentos; está lejos de ser la fuente más confiable de estos minerales.

Las siguientes secciones tratan específicamente de cómo los componentes del café pueden afectar la diabetes.

Según investigaciones, tomar de 3 a 4 tazas de café al día podría ayudar a reducir el riesgo de una persona de desarrollar diabetes tipo 2.

En un estudio amplio de 2013, las personas que aumentaron la cantidad de café que bebieron en más de 1 taza al día durante un período de 4 años tuvieron un riesgo 11 por ciento menor de desarrollar diabetes tipo 2 que aquellas que no hicieron cambios en su consumo de café.

El estudio también determinó que las personas que disminuyeron su consumo de café en más de 1 taza al día tenían 17 por ciento más de probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2.

En un comunicado de prensa, el autor principal del estudio, Shilpa Bhupathiraju, Ph.D., declaró:

“Nuestros hallazgos confirman los que se incluyeron en estudios previos que demostraron que un mayor consumo de café se relaciona a un menor riesgo de diabetes tipo 2. […] Lo más importante es que proporcionan nuevas pruebas de que los cambios en el hábito de consumo de café pueden afectar al riesgo de diabetes tipo 2 en un período de tiempo relativamente corto”.

En una revisión publicada un año más tarde, los científicos analizaron 28 estudios, incluyendo más de un millón de participantes en total. Los investigadores determinaron que tanto el café con cafeína como el descafeinado reducían el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.

La evidencia acumulada sugiere fuertemente que beber café puede ayudar a proteger contra esta afección.

El café solo no parece aumentar directamente los niveles de azúcar en la sangre o la glucosa en la sangre. Esta es una buena noticia para las personas con diabetes a las que les gusta el café negro.

Sin embargo, algunas investigaciones sugieren que la cafeína en el café podría afectar la sensibilidad a la insulina, lo cual no es ideal para las personas con diabetes.

Dicho esto, otros compuestos en el café, notablemente el magnesio, el cromo y los polifenoles, pueden desempeñar un papel en mejorar la sensibilidad a la insulina, lo que puede compensar los efectos de la cafeína.

Debido a esto, algunos expertos sugieren que las personas con diabetes tomen café descafeinado para obtener los beneficios de componentes como antioxidantes y minerales sin afectar la sensibilidad a la insulina.

Según un pequeño estudio piloto en personas con diabetes tipo 2, tomar cafeína antes de hacer ejercicio puede reducir los niveles de azúcar en la sangre.

Otro estudio en personas con diabetes tipo 1 sugiere que tomar un suplemento de cafeína podría atenuar modestamente el nivel bajo de azúcar en la sangre durante el ejercicio. Sin embargo, los investigadores advierten que esto podría aumentar el riesgo de inicio tardío de azúcar baja en la sangre.

La cafeína es el principal estimulante del café. Está naturalmente en granos de café y té verde. La cafeína acelera el sistema nervioso central y puede aumentar la lucidez mental, aliviar el cansancio y mejorar la concentración.

En la población general, la Dirección de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) informa que 400 miligramos de cafeína, o 4 a 5 tazas de café, al día, generalmente no tienen efectos negativos.

Sin embargo, debido a que la investigación en personas con diabetes ha tenido distintos resultados, es buena idea consultar al médico sobre la cantidad segura de café.

Algunas personas son más sensibles que otras a los efectos de la cafeína. Esto es así para las personas con o sin diabetes.

Algunos expertos sugieren que el café descafeinado es la opción más segura para las personas con diabetes porque proporciona los beneficios de otros componentes del café sin los riesgos potenciales de la cafeína.

También es importante tener en cuenta que agregar azúcar o crema al café aumenta los niveles de azúcar en la sangre.

Las personas con diabetes se benefician al elegir bebidas sin azúcar agregado.
Algunas personas usan edulcorantes artificiales, pero la investigación indica que algunos de estos productos, particularmente la sucralosa, pueden afectar los niveles de azúcar en la sangre de manera dañina.

Un edulcorante no calórico adecuado para la diabetes, como la fruta del monje, puede ser una opción más saludable cuando necesitas endulzar una bebida. Una persona podría intentar usar un poco menos cada día, con el objetivo de eventualmente eliminar los edulcorantes por completo.

El café contiene muchos productos químicos que tienen diferentes efectos en el cuerpo. Algunos son beneficiosos para las personas con diabetes, mientras que otros pueden ser menos saludables.

Las investigaciones sugieren que el café puede reducir el riesgo de una persona de desarrollar diabetes tipo 2.

Para las personas que viven con diabetes, la orientación de los científicos es diversa. Algunos estudios dicen que la cafeína puede reducir la sensibilidad a la insulina, aunque otros productos químicos saludables en el café podrían atenuar estos efectos.

Por esta razón, algunos médicos creen que cambiar a café descafeinado es una apuesta más segura.

Es crucial tener en cuenta que el café con azúcar o crema puede elevar los niveles de azúcar en la sangre. Para una persona con diabetes, la manera más saludable de beber café es negro o con un edulcorante alternativo natural.

Lee el artículo en inglés.

Traducción al español por HolaDoctor.

Edición en español por Suan Pineda el 21 de diciembre de 2021.

Versión original actualizada el 29 de septiembre de 2020.

Última revisión médica realizada el 28 de septiembre de 2020.