COVID-19 y la gripe pueden causar síntomas similares. Sin embargo, hay varias diferencias entre ellos.

Los CDC recomiendan que todas las personas utilicen mascarillas en lugares públicos en donde sea difícil mantener una distancia de 6 pies con otras personas. Esto ayudará a disminuir el contagio del virus por parte de personas asintomáticas o de personas que no saben que han contraído el virus. Se deben usar mascarillas faciales de tela mientras se continúe practicando el distanciamiento social. Las instrucciones para fabricar mascarillas en casa se pueden encontrar aquí. Aviso: Es vital que las mascarillas quirúrgicas y los respiradores N95 se reserven para el personal sanitario.

La nueva cepa de coronavirus (SARS-CoV-2) causa la enfermedad de coronavirus 19 (COVID-19).

Tanto COVID-19 como la gripe son enfermedades respiratorias que se transmiten de persona a persona. En este artículo analizamos las diferencias entre COVID-19 y la gripe.

Los síntomas de la gripe y COVID-19 tienen algunas diferencias.

Las personas que tienen gripe generalmente experimentarán síntomas en el término de 1 a 4 días. Los síntomas de COVID-19 pueden desarrollarse entre 1 y 14 días. Sin embargo, según investigaciones de 2020, la mediana del período de incubación de COVID-19 es de 5.1 días.

Como punto de comparación, el período de incubación para un resfriado es de 1 a 3 días.

Los síntomas de COVID-19 son similares en niños y adultos. Sin embargo, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), los niños suelen presentar fiebre y síntomas leves parecidos a los del resfriado, como secreción nasal y tos.

En la siguiente tabla se detallan los síntomas de COVID-19, la gripe y un resfriado.

Los síntomas de COVID-19 y la gripe pueden ser desde moderados a graves. Ambos también pueden causar neumonía.

Es importante tener en cuenta que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha clasificado los síntomas leves de COVID-19 como indicativos de que una persona no requerirá hospitalización. La OMS clasifica los siguientes síntomas como casos leves de la enfermedad:

  • fiebre
  • tos
  • fatiga
  • pérdida del apetito
  • congestión nasal
  • dolor de garganta
  • dolor de cabeza

Según la OMS, alrededor del 15% de los casos de COVID-19 son graves y el 5% son críticos. Las personas en estado crítico necesitan un ventilador para respirar. La posibilidad de sufrir una infección grave y crítica es mayor con COVID-19 que con la gripe.

COVID-19 también es más mortífero. Según la OMS, la tasa de mortalidad de COVID-19 parece ser más alta que la de la gripe.

En comparación con la gripe, la investigación sobre COVID-19 aún se encuentra en sus primeras etapas. Estas estimaciones podrían cambiar con el tiempo.

Tanto el SARS-CoV-2 como el virus de la gripe pueden propagarse a través del contacto de persona a persona.

Las diminutas gotas que contienen los virus pueden pasar de alguien infectado a otra persona, generalmente a través de la nariz y la boca al toser y estornudar.

El virus también puede vivir en superficies. La OMS no sabe a ciencia cierta cuánto tiempo puede sobrevivir el virus, pero podrían ser días.

Según los CDC, una persona puede transmitir el virus de la gripe a otra persona que se encuentre a una distancia de 6 pies. Según la OMS, las personas deben mantenerse al menos a 6 pies (poco más de metro y medio) de distancia de cualquier persona que tosa o estornude para ayudar a prevenir la transmisión de la infección por SARS-CoV-2.

Según la OMS, la velocidad de transmisión difiere entre los dos virus. Los síntomas de la gripe se presentan antes y pueden propagarse más rápido que el virus SARS-CoV-2.

La organización también indica que las personas con gripe pueden transmitir el virus antes de mostrar síntomas. También es posible transmitir la infección por SARS-CoV-2 incluso si no se tienen síntomas.

También hay diferencias en la transmisión entre niños y adultos.

Según la OMS, es común que se transmita la gripe de niños a adultos. Sin embargo, basado en los primeros datos, parece que es más común que los adultos transmitan la infección por SARS-CoV-2 a los niños. Los niños tienen menos probabilidades de desarrollar síntomas.

Dado que la gripe ha existido por mucho más tiempo que COVID-19, las opciones de tratamiento son mayores.

La mayoría de las personas con gripe no necesitan tratamiento médico. Sin embargo, un médico puede recetar medicamentos antivirales en algunos casos, que pueden reducir los síntomas por 1 a 2 días.

Estos medicamentos antivirales ayudan al cuerpo a combatir el virus, tratan los síntomas y reducen la duración de la enfermedad.

Actualmente no hay medicamentos antivirales aprobados para tratar COVID-19, aunque los científicos están investigando medicamentos en ensayos. La disponibilidad de antivirales para tratar COVID-19 probablemente aumentará cuando los científicos hayan tenido más tiempo para estudiar la enfermedad.

Aunque actualmente no existe un tratamiento o vacuna aprobada para COVID-19, existen formas de ayudar a tratar los síntomas y cualquier complicación que pueda presentarse.

Para casos leves, es necesario permanecer en casa y emprender el distanciamiento social. Profesionales médicos pueden recetar antipiréticos para reducir la fiebre.

Para casos más graves, es posible que se necesite oxígeno suplementario o ventilación mecánica en una máquina de respiración para tratar los problemas respiratorios que pueden presentarse.

La vacunación es la forma más efectiva de prevenir la gripe.

Muchas cepas de influenza pueden causar infección. Las cepas más comunes varían según la temporada.

Los médicos intentarán predecir qué cepas serán más comunes cada temporada a fin de seleccionar los componentes correctos de la vacuna.

Actualmente no se cuenta con una vacuna para la infección por SARS-CoV-2. El virus es nuevo y desarrollar vacunas seguras lleva tiempo.

La mejor manera de prevenir la propagación del virus SARS-CoV-2 incluye:

  • lavarse las manos regularmente
  • evitar tocarse la cara
  • mantenerse al menos a 6 pies (poco más de metro y medio) de distancia de cualquier persona que estornude y tosa
  • cubrirse la boca al estornudar o toser
  • quedarse en casa si tienes una sensación general de malestar
  • trabajar desde casa, de ser posible
  • evitar aglomeraciones y reuniones de cualquier tamaño

Tanto COVID-19 como la gripe son infecciones virales.

Los virus son microbios diminutos que sobreviven al invadir otras células vivas. Estas células se convierten en células huésped del virus, que se multiplica dentro de las mismas. Luego pueden propagarse a nuevas células alrededor del cuerpo.

Los coronavirus son una familia de virus que causan infecciones respiratorias. El SARS-CoV-2 causa la infección que provoca COVID-19.

Hay dos tipos de virus que causan la gripe: influenza A y B; también hay varios subtipos de influenza A. Cualquiera de estos virus puede causar la gripe.

COVID-19 y la gripe comparten algunos síntomas similares. Los síntomas de la gripe tienden a ocurrir más rápido y pueden tener una mayor variación. Pero COVID-19 tiene más probabilidades de provocar enfermedades graves o la muerte.

Ambos virus se propagan a través del contacto de persona a persona. La gripe se propaga más rápido y probablemente afectará más a los niños.

Dado que la gripe ha estado presente por más tiempo, se cuenta con varios tratamientos antivirales y vacunas. Los investigadores y científicos los están desarrollando actualmente para COVID-19, pero no es probable que los tratamientos y las vacunas estén disponibles en un corto tiempo.

La mejor manera de prevenir COVID-19 es practicar el distanciamiento social, lo que significa evitar cualquier contacto social o viaje no esencial. Es fundamental mantener una buena higiene personal y de la casa lavándote las manos regularmente y manteniendo limpias las superficies y los utensilios.

Las infecciones virales causan COVID-19 y gripe. Pero COVID-19 proviene del virus SARS-CoV-2, y la gripe de los virus de influenza A y B.

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