Las encías se pueden retraer o desgastarse y exponer el tejido rosado que cubre las raíces de los dientes.
Las encías también se pueden retraer alrededor de un diente si está en una posición anormal.
La retracción de las encías se convierte en un problema de salud cuando las raíces de los dientes quedan expuestas, dejando los dientes en riesgo de caries, infecciones y pérdida.
Si el tratamiento se comienza en una etapa temprana, esto puede detener o revertir el proceso de retracción de las encías.
Si la retracción es grave y causa síntomas, como sensibilidad dental, dolor o infección, hay varios tratamientos disponibles. Estos incluyen limpieza profunda, medicamentos para la infección e injertos de tejido.
La retracción de las encías es una condición común, pero las personas a menudo no se dan cuenta de que sus encías están retrocediendo hasta una etapa avanzada.
La retracción de las encías es una condición que daña el tejido blando y rosado que rodea los dientes.
Las encías están compuestas de tejido rosado en la boca que está en contacto con la base de los dientes. Hay una encía por cada conjunto de dientes.
El tejido gingival es denso. Tiene un buen suministro de vasos sanguíneos debajo de una superficie húmeda, también conocida como membrana mucosa. El tejido gingival se conecta con el resto del revestimiento de la boca, pero es rosado en lugar de rojo brillante.
Las encías están firmemente adheridas a la mandíbula y cubren herméticamente cada diente hasta el cuello. Cuando están intactas, las encías cubren las raíces de los dientes y las protegen.
La retracción gingival ocurre después de que se ha experimentado una pérdida de tejido en la encía. Expone las frágiles raíces de los dientes a las bacterias y la placa, y puede provocar caries.
La mala higiene bucal y la enfermedad periodontal contribuyen a una retracción gingival. Sin embargo, la retracción de las encías también puede ocurrir en personas con una buena higiene bucal.
El desgaste físico de las encías y la inflamación de los tejidos son las principales razones de la retracción.
Algunas personas también pueden ser propensas a la retracción de las encías debido a factores hereditarios. Estos factores incluyen la posición de los dientes y el grosor de las encías.
Otra causa común de retracción de las encías es el desgaste físico de las encías por el cepillado vigoroso de los dientes o el uso de cerdas duras. El cepillado excesivo provoca la retracción de las encías incluso cuando la higiene dental podría ser buena.
Este tipo de retracción física a menudo afecta más el lado izquierdo de la boca. Esto se debe a que la mayoría de las personas usan un cepillo de dientes en la mano derecha y ejercen más presión sobre las encías del lado izquierdo. El patrón también tiende a afectar las encías laterales más que el área frontal.
Otros factores físicos que hacen retroceder las encías incluyen perforaciones en los labios o en la lengua, dientes desalineados y daños por tratamientos dentales.
Algunas personas son más propensas a las causas inflamatorias de encías retraídas debido a que tienen tejido más delicado. El tejido de las encías más delgado hace que sea más probable que la placa cause inflamación.
Cuando la placa se acumula en los dientes, puede causar las siguientes condiciones dentales:
- Encías inflamadas: esta afección se conoce como gingivitis y puede provocar periodontitis.
- Periodontitis: esto crea espacio entre las encías y los dientes, además de la pérdida de fibras conectivas y hueso alrededor de las raíces de los dientes. Esto puede provocar la retracción de las encías y la pérdida de masa ósea.
La enfermedad periodontal es una causa común de retracción de las encías. La enfermedad periodontal provoca la pérdida del hueso y tejido de soporte alrededor de un diente a través de una reacción inflamatoria. La retracción de las encías suele afectar a todos los dientes de forma similar.
Factores de riesgo
La edad es un factor de riesgo clave para la retracción de las encías. Alrededor del 88% de las personas mayores de 65 años tienen retracción de la encía en al menos un diente.
Las personas que fuman y consumen productos de tabaco también se enfrentan a un mayor riesgo de retracción de las encías.
La genética es otro factor, ya que quienes tienen encías delgadas o débiles pueden pasar estas características a través de sus genes.
La diabetes también puede aumentar el riesgo de retracción de las encías.
La retracción de las encías puede hacer que los dientes sean sensibles al frío y al calor.
Muchas personas con retracción de las encías no se preocupan por ellas desde el principio, y es posible que no se den cuenta de que sus encías se están retrayendo.
Sin embargo, cuando se tiene retracción de las encías, se puede experimentar lo siguiente:
- preocupaciones sobre el cambio de apariencia, ya que el diente parece más largo y el espacio entre los dientes aumenta
- temor de perder los dientes
- sensibilidad al frío y al calor debido a las raíces dentales expuestas
Más importante aún, la retracción de las encías puede ser un síntoma de problemas dentales subyacentes, incluyendo la enfermedad de las encías, y puede aumentar el riesgo de caries y pérdida de dientes. También pueden provocar mal aliento y sangrado de encías.
La mayoría de los casos de retracción leve de las encías no necesitan tratamiento. Los dentistas pueden asesorar sobre la prevención y ofrecer controlar las encías. Enseñar un cepillado efectivo, pero suave es una intervención temprana eficaz.
Si se necesita tratamiento, hay varias opciones disponibles:
- Agentes desensibilizantes, barnices y adhesivos de dentina: estos productos tienen como objetivo reducir la sensibilidad de la raíz expuesta del diente. Los agentes desensibilizantes tratan los síntomas en el nervio y ayudan a preservar la higiene bucal facilitando el cepillado de los dientes sensibles.
- Restauración con resina compuesta: un dentista usa resinas compuestas (composite) del color de los dientes para cubrir la superficie de la raíz. También pueden cerrar los espacios negros entre los dientes, como se muestra en estas imágenes de antes y después del British Dental Journal.
- Porcelana rosa o resina compuesta: este material es del mismo color rosa de las encías y se puede aplicar para rellenar los espacios donde las encías han retrocedido.
- Carillas de encía removibles: generalmente son de acrílico o de silicona, y reemplazan artificialmente la gran área de tejido faltante de las encías debido a la retracción.
- Ortodoncia: incluye tratamientos que mueven lentamente la posición de los dientes durante un período prolongado. Este reposicionamiento puede corregir el margen de la encía y facilitar la limpieza de los dientes.
- Cirugía: un cirujano dental injerta tejido de otro sitio de la boca y el tejido cicatriza sobre la retracción de las encías. Por lo general, una persona solo necesitaría esto para tratar la retracción grave de las encías.
Algunas de las causas de la retracción gingival se pueden prevenir.
La causa más obvia y prevenible es cepillarse los dientes con demasiada fuerza o usar un cepillo de dientes de cerdas duras. En cambio, se debe usar un cepillo de dientes de cerdas suaves y evitar cepillarse en exceso, y pasar el cepillo con suavidad.
Haz clic aquí para comprar de una amplia selección de cepillos de dientes suaves, calificados por miles de clientes.
La acumulación de placa y el sarro pueden provocar enfermedad periodontal, por lo que mantener una buena higiene bucal también puede ayudar a prevenir la retracción de las encías.
Las personas que tienen inquietudes sobre sus dientes o la retracción de las encías deben visitar a su dentista para hablar sobre sus preocupaciones.