Una parte importante de controlar la enfermedad de Crohn es realizar cambios a la dieta para prevenir los síntomas de un brote. El alcohol es un desencadenante común de la enfermedad de Crohn, y algunas personas que tienen la enfermedad deben evitar, o al menos restringir, su ingesta.

La enfermedad de Crohn es un tipo de enfermedad intestinal inflamatoria. Puede afectar todo el tracto gastrointestinal, desde la boca hasta el ano, pero con más frecuencia afecta el intestino delgado y grueso.

Los síntomas de la enfermedad de Crohn varían según la persona, y pueden cambiar con el tiempo. No hay cura para esta afección.

El tratamiento se enfoca en hacer que la enfermedad entre en remisión, que es cuando una persona experimenta síntomas muy limitados, si es que los tiene.

Continúa leyendo para obtener más información sobre la relación entre la enfermedad de Crohn y el alcohol.

a man holding a glass of alcohol that may affect his Crohn's disease when he eats it.Share on Pinterest
La forma en la que el alcohol afecta la enfermedad de Crohn varía según la persona.

El alcohol puede afectar el sistema inmunitario, provocando cambios en los químicos que causan la inflamación en el intestino. Esto puede desencadenar o empeorar los síntomas.

Estos cambios químicos pueden interrumpir el funcionamiento del intestino. Las personas con la enfermedad de Crohn son particularmente susceptibles a este tipo de daño intestinal.

Debido a que cada persona con la enfermedad de Crohn tiene una experiencia diferente, no existe una sola regla sobre cómo manejar la ingesta de alcohol. Es posible que el alcohol no cause síntomas de la enfermedad de Crohn en una persona, pero sí cause reacciones severas en otra, quien quizá necesite eliminarlo completamente de su dieta.

Además, las personas con la enfermedad de Crohn pueden reaccionar diferente a distintos tipos de alcohol. Por ejemplo, es posible que sea fácil tolerar el alcohol fuerte, mientras que la cerveza sea un desencadenante fuerte para los síntomas.

Es importante que cualquier persona con la enfermedad de Crohn se tome el tiempo para hablar con su médico sobre los síntomas y cómo evolucionan.

Evitar el alcohol por un tiempo y volver a tomarlo lentamente puede ayudar a una persona a tener una mejor idea de cómo responde su cuerpo.

Algunos estudios han observado el consumo de alcohol entre personas con tipos específicos de enfermedad intestinal inflamatoria, como la enfermedad de Crohn.

Un estudio de 2010 en la revista Alcohol determinó que tomar alcohol puede empeorar los síntomas de la enfermedad de Crohn. Sin embargo, solo observaron a 129 personas con enfermedad intestinal inflamatoria, 52 de las cuales tenían la enfermedad de Crohn, y se basaron en las respuestas a un cuestionario.

Un estudio de 2018 en el Journal of Gastroenterology llegó a conclusiones similares. Como en el estudio anterior, los autores determinaron que las personas que bebían alcohol tenían más probabilidad de reportar aumento de los síntomas de la enfermedad de Crohn.

Los autores del estudio reconocieron que se requiere mucha más investigación antes de llegar a una conclusión definitiva.

Una revisión importante publicada en Annals of Gastroenterology en 2018, observó los resultados de 12 estudios que habían investigado los efectos del alcohol en personas con una enfermedad intestinal inflamatoria.

La mayoría de estos estudios también concluyeron que los síntomas de Crohn empeoraban con el consumo de alcohol. Los autores indicaron también que se requería más investigación para confirmar los hallazgos.

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Las bebidas con mayor contenido de azúcar pueden causar más brotes de la enfermedad de Crohn.

Las mejores bebidas son aquellas que no hacen que los síntomas aparezcan.

Puede ser útil alejarse del alcohol por un tiempo hasta que la enfermedad esté en remisión. Una persona podría probar pequeñas cantidades de un tipo de bebida y poner atención a cómo las tolera su cuerpo.

Un estudio analizó los efectos de las bebidas alcohólicas en las personas con la enfermedad de Crohn: vino tinto, vino blanco, una bebida mezclada con vodka, una marca de cerveza y etanol puro.

Los investigadores determinaron que los participantes absorbieron estas bebidas de manera similar, pero el cóctel embotellado y la cerveza causaron más dolor abdominal que los otros tres tipos de bebida.

El equipo atribuyó esta reacción al alto contenido de azúcar en el cóctel y la cerveza.

Otro estudio observó específicamente el vino tinto consumido durante la remisión de la enfermedad intestinal inflamatoria. Los autores determinaron que tomar incluso cantidades moderadas de vino tinto puede provocar un aumento de la permeabilidad, o derrame, en los intestinos, lo que podría causar brotes y agravar los síntomas.

Un brote es un período de aumento en la inflamación en el tejido que la enfermedad de Crohn afecta. Esto puede ocasionar muchos otros síntomas, incluso:

  • diarrea
  • dolor abdominal, calambres, o ambos
  • sangrado rectal
  • estreñimiento que puede causar obstrucción intestinal
  • urgencia de una deposición

Algunas personas también tienen síntomas en otras partes del cuerpo. Estos pueden incluir:

  • dolor de articulaciones
  • erupción cutánea
  • llagas en la boca
  • fatiga
  • pérdida del apetito
  • pérdida de peso
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Los analgésicos pueden ayudar con los brotes de la enfermedad de Crohn.

Cualquier persona con la enfermedad de Crohn debería hablar de las formas para controlar los brotes con el médico. Si has identificado un desencadenante, deberías eliminarlo de tu dieta lo más pronto posible.

Asegúrate de tomar todos los medicamentos exactamente como los recetan, incluso si los síntomas están en remisión. Es importante no dejar de tomar ninguna dosis debido a que esto aumenta el riesgo de un brote.

Es buena idea mantener a mano todo lo que pueda ayudar con un brote. Para algunas personas, esto significa:

  • analgésicos
  • almohadilla térmica
  • toallitas húmedas para limpieza
  • medicamentos antidiarreicos
  • jabón suave para limpiar el tejido anal irritado o sensible
  • enjuague bucal medicado para las llagas
  • ungüento protector

Habla con el médico si los brotes ocurren con frecuencia o si es difícil controlarlos.

La enfermedad de Crohn es una enfermedad inflamatoria crónica. Afecta principalmente el tracto intestinal y puede causar molestias graves durante los brotes.

Aunque se sabe que el alcohol es un desencadenante de la enfermedad de Crohn, es posible que no signifique que una persona con la enfermedad necesite eliminarlo de su dieta.

La enfermedad de Crohn afecta a las personas de diferente manera, y las personas pueden tener diferentes reacciones a varias bebidas alcohólicas y otros desencadenantes.

Hablar y colaborar con el médico puede ayudar a que una persona comprenda qué desencadena sus síntomas y cómo manejar mejor el alcohol.

Lee el artículo en inglés.

Traducción al español por HolaDoctor.

Edición en español por Suan Pineda el 16 de junio de 2021.

Versión original escrita el 29 de octubre de 2019.

Última revisión médica realizada el 29 de octubre de 2019.