El flujo vaginal es una parte normal del ciclo menstrual y el color y la consistencia cambian a lo largo del mes. Sin embargo, algunos tipos de flujo indican una afección subyacente.
Muchas mujeres tienen un flujo espeso y blanco antes de un periodo. Esto se considera saludable a menos que el flujo sea grumoso o tenga un olor fuerte.
Sigue leyendo para descubrir más sobre los cambios en el flujo durante todo el ciclo menstrual y por qué un flujo blanco puede aparecer antes de un periodo.
El uso de la píldora anticonceptiva puede conducir a un aumento en el flujo vaginal blanco.
El flujo vaginal normal se llama leucorrea. Está compuesto de líquido y bacterias de las células en la vagina. La mayoría de las mujeres producen casi una cucharadita, o 4 ml, de flujo blanco o transparente todos los días.
El flujo antes de un periodo tiende a ser turbio o blanco, debido a la mayor presencia de progesterona, una hormona involucrada tanto en el ciclo menstrual como en el embarazo.
En otras fases del ciclo, cuando los niveles de estrógeno en el cuerpo son más altos, el flujo vaginal tiende a ser transparente y acuoso.
El flujo ayuda a lubricar y eliminar las bacterias de la vagina. También puede ser una forma conveniente para que las mujeres den seguimiento a su ciclo menstrual.
El flujo blanco puede ser el resultado de los siguientes factores.
Función reproductiva normal
El flujo blanco es común al comienzo y al final de la menstruación. Suele ser escaso y elástico, y no debe ir acompañado de picazón u olor.
Anticonceptivos hormonales
El uso de estos tipos de anticonceptivos, incluyendo la píldora anticonceptiva, puede conducir a un flujo más abundante, ya que los niveles hormonales pueden verse afectados. El aumento no suele ser motivo de preocupación a menos que tengas otros síntomas.
Infección micótica
Las infecciones micóticas, también conocidas como candidiasis, son una queja común entre las mujeres. Se estima que casi el 75% de las mujeres sufrirán al menos una infección micótica en su vida.
El flujo asociado con una infección micótica suele tener la apariencia de requesón: es espeso, blanco y grumoso. Otros síntomas incluyen picazón y ardor en y alrededor de la vagina.
Vaginosis bacteriana
Cerca del 30% de las mujeres en edad fértil tiene vaginosis bacteriana (VB), una infección causada por desequilibrios bacterianos en la vagina.
La VB está asociada con las duchas vaginales y tener más de una pareja sexual. El flujo tiende a ser de color blanco grisáceo y tiene un olor a pescado.
Infecciones de transmisión sexual
Varias infecciones de transmisión sexual (ITS) causan cambios en el flujo vaginal. Las infecciones pueden incluir clamidia, gonorrea y tricomoniasis.
El flujo causado por clamidia o gonorrea podría ser más amarillento que blanco, aunque no todas presentan síntomas. La tricomoniasis puede causar un olor a pescado, secreción de color verde amarillento y picazón.
En algunos casos, una mujer embarazada experimentará mayor flujo justo antes de que termine su periodo. Este puede ser uno de las primeras señales de embarazo.
No siempre es fácil distinguir este tipo de flujo del flujo normal, pero puede tener una textura más espesa.
Es posible que haya mayor flujo antes de la ovulación que después.
El flujo vaginal cambia a lo largo del ciclo. Una persona generalmente puede ver las diferencias en cada etapa, que incluyen:
- En la ovulación. El flujo suele ser transparente, elástico y acuoso. Una consistencia fina ayuda a los espermatozoides a viajar al óvulo. Antes de la ovulación, generalmente hay más flujo, posiblemente hasta 30 veces la cantidad habitual.
- Después de la ovulación. Los niveles altos de progesterona hacen que el flujo tenga una apariencia blanca. Este tipo de flujo puede durar hasta 14 días. Puede ser espeso y pegajoso, pero la cantidad será menor a la que había durante la ovulación.
- Justo antes del periodo. El flujo puede ser blanco con un tinte amarillento.
- Justo después del periodo. Podría haber un flujo café, compuesto de sangre vieja que sale de la vagina. Después de esto, es posible que pasen 3 o 4 días sin que haya flujo.
El flujo que no es blanco podría ser:
- Transparente. El flujo transparente suele ser normal. Podría haber más flujo después de hacer ejercicio o durante la excitación sexual. La ovulación y el embarazo también pueden ocasionar flujo.
- Gris. El flujo grisáceo sugiere VB. Las mujeres con flujo gris deben consultar a un médico, ya que podrían necesitar tratamiento.
- Verde o amarillo. Si bien el flujo de color amarillo claro no es motivo de preocupación, la mucosidad amarilla oscura o verde puede indicar una infección. Sin embargo, algunas mujeres reportan flujo amarillo después de probar nuevos alimentos o suplementos.
- Rosado. El flujo rosado puede presentarse al comienzo de un periodo o después de la relación sexual. Las mujeres con flujo rosado no relacionado con sus periodos deben consultar a un médico.
- Rojo o café. Esta coloración es normal inmediatamente antes o después de un periodo. Sin embargo, el flujo rojo en otros momentos del ciclo puede sugerir una infección.
Es importante tener en cuenta que los cambios hormonales, que pueden ser provocados por el control de la natalidad o el embarazo, pueden causar manchas leves.
El flujo vaginal tiende a cambiar de color y consistencia a lo largo del ciclo menstrual. El flujo que aparece antes de un periodo suele ser blanco.
Sin embargo, si un cierto tipo de secreción persiste durante todo el mes, sería buena idea consultar a un médico.
Consulta con un médico si presentas alguno de los siguientes síntomas:
- flujo grumoso o espumoso
- dolor o ardor en o alrededor de la vagina
- erupción cutánea
- enrojecimiento
- llagas
- flujo con un olor fuerte o mal olor
- hinchazón
El flujo vaginal normal no requiere ningún tratamiento. El flujo anormal y el flujo acompañados de dolor o picazón pueden controlarse con medicamentos, remedios caseros o una combinación de ambos.
Medicamentos
En caso de una infección, un médico te recetará medicamentos o te recomendará un producto de venta libre.
Las infecciones micóticas, por ejemplo, se tratan con medicamentos antimicóticos que se pueden insertar en la vagina o tomar por vía oral.
Generalmente se recetan antibióticos para tratar VB, clamidia, gonorrea y tricomoniasis.
Remedios caseros
Se pueden recomendar alimentos ricos en probióticos, como el kéfir, para estimular una flora vaginal saludable.
Los siguientes cambios en el estilo de vida pueden garantizar un ambiente vaginal saludable:
- Practica una buena higiene. Mantén la parte externa del área genital limpia y seca para evitar olores vaginales y bacterias.
- Usa ropa interior de algodón transpirable y evita usar pantimedias. La ropa ajustada y sintética puede aumentar el riesgo de infecciones vaginales.
- Usa un protector diario para mayor comodidad. En los días en que el flujo vaginal es abundante, por ejemplo, durante la ovulación, un protector diario puede absorber el exceso de humedad que podría causar molestias o irritación. Puedes comprar una línea de protectores diarios en línea.
- Límpiate de adelante hacia atrás. Después de usar el baño, límpiate siempre de adelante hacia atrás para evitar que las bacterias se propaguen del ano a la vagina.
- Evita usar tampones y duchas vaginales. Ambos pueden introducir nuevos microbios en la vagina, y esto puede aumentar el riesgo de infección.
- No uses productos perfumados alrededor o dentro de la vagina. No es recomendable usar toallitas perfumadas, desodorantes vaginales o baños de burbujas, ya que pueden causar irritación.
- Toma probióticos. Algunas investigaciones sugieren que los suplementos probióticos pueden promover una flora vaginal saludable. Ciertas cepas probióticas se comercializan para la salud de las mujeres y pueden comprarse en línea. Consumir alimentos ricos en probióticos, como el yogur natural y el kéfir, también puede ayudarte.
- Usa anticonceptivos de barrera. Usar condones puede reducir el riesgo de contraer una ITS. Puedes comprar una variedad de condones en línea.
El flujo blanco, especialmente cuando aparece antes de un periodo, suele ser una parte normal del ciclo menstrual.
Sin embargo, la mayoría de las mujeres sufrirán una infección vaginal en algún momento de su vida, así que presta atención a cualquier cambio inusual en el flujo. La mayoría de estas infecciones se pueden controlar, especialmente con la intervención médica inmediata.
Muchos remedios caseros y cambios en el estilo de vida pueden prevenir y tratar las infecciones vaginales.