A lo largo del ciclo menstrual, se dan cambios en el moco cervical. Este tipo de secreción es saludable y es una señal de ovulación regular.
Existe un método de control de fertilidad que utiliza los cambios en el moco cervical para predecir la ovulación.
Cuando una persona es fértil, el flujo cervical es acuoso, delgado y viscoso, y puede parecerse a una clara de huevo.
La ovulación es cuando un ovario libera un óvulo para la fertilización.
El moco cervical es un líquido que el cuello uterino libera en la vagina. Tiene varias funciones, entre ellas, la lubricación de la vagina y la prevención de infecciones.
A lo largo del ciclo menstrual, los cambios hormonales influyen en la cantidad, textura y apariencia del moco cervical.
La cantidad de moco puede ser suficiente como para que se note en la ropa interior. Aunque el cuello uterino siempre produce algo de moco, produce más inmediatamente antes y después de la ovulación.
Así que, si una persona nota un aumento en la secreción vaginal, puede estar viendo moco cervical fértil.
El flujo fértil es delgado, claro o blanco y viscoso, muy parecido a una clara de huevo. Este tipo de flujo indica que se acerca la ovulación.
El líquido cervical fértil ayuda a los espermatozoides a subir por el cuello uterino para fertilizar un óvulo. También mantiene el esperma sano durante el viaje.
Por lo general, las personas notan flujo fértil unos días antes de ovular. El flujo se puede volver más húmedo y viscoso durante varios días. Después de la ovulación, la cantidad de flujo suele disminuir.
En el periodo de maduración, un óvulo crece dentro de una estructura llamada folículo, en el útero. El folículo crece y produce estrógeno. Cuando el folículo se rompe, el cuerpo ovula y libera un óvulo.
El estrógeno que produce el folículo suaviza el cuello uterino y lo amplía ligeramente. El estrógeno también cambia la textura del líquido cervical, haciéndolo más propenso a la fertilidad.
En cada mujer, el líquido cervical es ligeramente diferente. Por lo tanto, para detectar el flujo fértil, una persona debe controlar su ciclo durante varios meses.
Los días en que la secreción cambia varían de una persona a otra. Por ejemplo, las mujeres que ovulan más tarde en su ciclo suelen tener un flujo fértil después del día 14.
En general, el ciclo de flujo sigue este patrón:
- Ciclo temprano (días 1 a 5): esto es cuando ocurre la menstruación.
- Posperiodo (días 5 a 10): al principio, puede haber poco o ningún flujo, pero pronto puede aparecer un líquido pegajoso similar al pegamento. Este es un momento de baja fertilidad.
- Preovulación (días 10 a 14): el cuerpo comienza a producir más estrógeno. El líquido pegajoso se puede ver más ralo y turbio. Finalmente, se vuelve viscoso y comienza a parecerse a las claras de huevo.
- Ovulación (día 14): el día de la ovulación, muchas notan que su líquido cervical está muy húmedo y viscoso. Se puede estirar el líquido más de dos centímetros entre los dedos.
- Posovulación (días 14 a 22): después de la ovulación, el cuerpo libera la hormona progesterona, que seca el líquido cervical. El flujo puede parecer turbio al principio, luego se vuelve más espeso.
- Preperiodo (días 22 a 28): a medida que se acerca un periodo, el flujo puede tener otra vez una consistencia similar a la de un pegamento. De 1 a 2 días antes de la menstruación, suele haber poco o ningún flujo. Algunas mujeres notan manchas justo antes de su periodo.
La ovulación desempeña un papel importante para determinar la consistencia del líquido cervical. Una mujer que no ovula puede notar menos cambios en su flujo vaginal.
Alguien que ovula muy tarde o temprano puede encontrar que su ciclo no sigue el horario “típico”.
Para detectar el flujo fértil, una persona debe controlar su ciclo durante varios meses.
El líquido cervical fértil es una buena señal de aumento de la fertilidad. Cualquiera que trate de quedar embarazada debería tener relaciones sexuales durante el tiempo en que nota el flujo fértil. Los médicos llaman a esto la “ventana fértil”.
Después de la ovulación, un óvulo solo vive de 12 a 24 horas, pero los espermatozoides pueden vivir mucho más tiempo, a menudo de 3 a 5 días en el líquido cervical fértil.
Esto significa que, para las mujeres que desean quedar embarazadas, el mejor momento para tener relaciones sexuales es justo antes de la ovulación, ya que los espermatozoides pueden vivir en el tracto reproductivo durante varios días. Si ya están allí cuando ocurre la ovulación, pueden fertilizar el óvulo de inmediato.
Para determinar la fertilidad, verifica la apariencia del líquido cervical al menos una vez al día, comenzando el primer día después de un periodo.
Puede ayudar llevar un seguimiento de los cambios que notas día a día en un diario o usar una aplicación digital para monitorearlos.
Para revisar el líquido cervical:
- Después de usar el baño, limpia el área alrededor de la vagina para eliminar el exceso de orina, ya que esto puede cambiar la apariencia del líquido cervical.
- Limpia el área con papel higiénico. Toma nota de cualquier líquido visible.
- Lávate las manos. Inserta suavemente un dedo aproximadamente media pulgada en la vagina.
- Retira el dedo y observa el color, la textura y la apariencia general del líquido.
- Si el líquido es transparente, delgado, acuoso y elástico, puede ser flujo cervical fértil.
Varios factores pueden influir en la apariencia del líquido cervical, por lo que una persona debe controlar la apariencia y la consistencia con el tiempo, para tener una idea de lo que es normal para cada una.
Algunas personas encuentran que su líquido cervical se ve diferente después de tener relaciones sexuales. Por ejemplo, la apariencia del flujo vaginal puede cambiar cuando el semen se mezcla con los fluidos vaginales. El jabón, los lubricantes y otros productos también pueden producir cambios.
Algunas personas producen moco cervical menos fértil, por lo que pueden no notarlo.
Otras no producen moco cervical fértil, y esto indica que hay un problema con la ovulación. La ovulación es menos probable cuando hay algunas condiciones médicas, como el síndrome de ovario poliquístico o SOP. Tener bajo peso también puede hacer que el cuerpo no ovule.
A medida que alguien se acerca a la menopausia, puede ovular con menos frecuencia. Algunas personas se quedan sin óvulos temprano, lo que un médico diagnosticaría como una disminución de la reserva ovárica. Esto puede provocar que una persona ovule de forma irregular, si es que lo hace.
Llevar un seguimiento de la apariencia y la consistencia del líquido cervical puede ayudar a una persona a determinar cuándo es fértil.
Este método es más confiable cuando una persona ha controlado los cambios en el líquido durante varios ciclos. Cuando se trata de líquido cervical, todos tienen una “normalidad” diferente. Una persona que conoce su patrón habitual puede detectar más fácilmente las señales de que está a punto de ovular.
Muchas personas también usan otros métodos de seguimiento de la fertilidad, como el control de la temperatura corporal basal y las pruebas de ovulación. Una combinación de métodos puede dar más certeza sobre la ovulación.
Es importante tener en cuenta que tener líquido cervical fértil no es una señal segura de fertilidad.
Aun cuando una persona no ovule, el cuerpo puede liberar altos niveles de estrógeno. Sin embargo, en general, si una persona no ovula, es mucho menos probable que tenga líquido cervical fértil.
Si bien los métodos caseros de control de la ovulación pueden ayudar, la única forma de verificar la ovulación es consultar a un médico o una partera.