La artritis reumatoide provoca una inflamación crónica que afecta no solo las articulaciones sino también otros sistemas orgánicos. Uno de los síntomas más inusuales de la artritis reumatoide es la bruma mental.

Muchas personas con artritis reumatoide dicen tener problemas para pensar con claridad, problemas de memoria y dificultad para concentrarse.

Estos síntomas, conocidos como bruma mental, pueden darse en personas con enfermedades inflamatorias crónicas, como la artritis reumatoide, el síndrome de Sjögren y la esclerosis múltiple.

No se sabe con exactitud cuán común es la bruma mental en las personas con artritis reumatoide, ya que la investigación sobre su prevalencia es limitada. Sin embargo, los estudios muestran que algún tipo de deterioro cognitivo puede afectar del 38 por ciento al 71 por ciento de las personas con artritis reumatoide.

La investigación define el deterioro cognitivo como una “dificultad para recordar, aprender cosas nuevas, resolver problemas, concentrarse o tomar decisiones”. Sin embargo, los síntomas específicos pueden variar de una persona a otra.

Con un tratamiento adecuado y tomando medidas preventivas, una persona con artritis reumatoide puede conseguir que la bruma mental desaparezca.

Las personas suelen asociar la artritis reumatoide con articulaciones hinchadas y dolorosas. Sin embargo, para algunas personas con artritis reumatoide, este es solo uno de los síntomas a los que se enfrentan.

La artritis reumatoide es una afección crónica que causa inflamación en todo el cuerpo. Esta inflamación puede provocar dolor y rigidez en las articulaciones, hinchazón y disminución de la movilidad articular.

Sin embargo, la artritis reumatoide también puede afectar los ojos, la piel, los pulmones y el cerebro. Muchas personas con artritis reumatoide y otras afecciones inflamatorias crónicas también se quejan de sentirse mentalmente confusas y de experimentar dificultades para pensar.

¿Por qué se desarrollan síntomas cerebrales con la artritis reumatoide?

Los científicos creen que puede haber una relación entre la inflamación crónica y el deterioro cognitivo al que las personas se refieren como bruma mental. Esto puede ser el resultado de varios factores, entre ellos:

  • El impacto de la inflamación crónica de la artritis reumatoide en el cerebro. Un estudio de 2018 mostró un vínculo entre esta inflamación y los cambios en los patrones de las conexiones cerebrales. También mostró un menor volumen de materia gris en una zona del cerebro conocida como lóbulo parietal inferior. El estudio sugiere que la fatiga, el dolor y el deterioro de la capacidad de pensar están asociados a estos cambios cerebrales. Estas alteraciones del tejido cerebral pueden tener un papel en la conversión de las señales de inflamación al resto del sistema nervioso central.
  • Corticosteroides. El riesgo de problemas cognitivos puede ser mayor en las personas que utilizan corticosteroides como tratamiento de la artritis reumatoide, y que tienen factores de riesgo de enfermedad cardíaca, entre los que se encuentran la hipertensión arterial y el colesterol alto.
  • Dolor crónico y fatiga. Las personas que viven con dolor crónico pueden encontrarse distraídas por el dolor y la fatiga que este provoca. El dolor no solo desvía la atención de la persona de las tareas mentales, sino que puede alterar la cantidad o la calidad del sueño, lo que provoca fatiga. Esto, a su vez, puede contribuir a la bruma mental.
  • Depresión y ansiedad. Muchas personas con artritis reumatoide y otras afecciones que causan dolor crónico experimentan depresión o ansiedad. La depresión y la ansiedad también pueden provocar bruma mental y una disminución de la capacidad de pensar con claridad. Del mismo modo, la depresión puede causar inquietud, insomnio y otros síntomas que pueden provocar la disminución de las capacidades mentales.

Además de la artritis reumatoide, muchos otros factores y afecciones pueden causar bruma mental. Entre ellas se encuentran las afecciones inflamatorias o de otro tipo, los trastornos del estado de ánimo y los factores relacionados con el estilo de vida.

Las siguientes afecciones y factores de estilo de vida pueden causar bruma cerebral:

  • síndrome de Sjögren
  • esclerosis múltiple
  • lupus
  • fibromialgia
  • problemas de tiroides, como hipotiroidismo o tiroiditis de Hashimoto
  • síndrome de fatiga crónica (SFC)
  • anemia
  • depresión
  • embarazo
  • menopausia
  • quimioterapia
  • antidepresivos
  • estrés
  • falta de sueño
  • falta de ejercicio

La bruma mental puede ser muy frustrante para quienes viven con artritis reumatoide. Hay medidas que una persona con artritis reumatoide puede tomar para ayudar a tratar y aliviar la bruma mental.

El tratamiento y las modificaciones al estilo de vida para ayudar a controlar la bruma mental asociada a la artritis reumatoide incluyen:

  • fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad, conocidos como DMARD
  • fármacos biológicos que bloquean la inflamación y alivian el dolor
  • dormir lo suficiente
  • hacer ejercicio regularmente
  • terapia psicológica, como la terapia cognitivo-conductual (TCC)
  • organizarse con un horario fijo, un planificador con eventos clave y listas de tareas pendientes

¿La artritis reumatoide provoca problemas de dicción (dificultad para hablar)?

Según las investigaciones, las personas con un mayor deterioro cognitivo como consecuencia de la artritis reumatoide pueden tener dificultades para hablar, además de otros síntomas como dificultades de concentración o de memoria.

¿Cómo identifican los médicos la bruma mental de la artritis reumatoide frente a un tumor cerebral?

Un tumor cerebral también puede causar bruma mental. Esta puede ser una afección potencialmente mortal, por lo que es importante darse cuenta de cuándo la bruma mental de una persona puede ser algo más que una artritis reumatoide u otro trastorno crónico diagnosticado. Hay muchos tipos de tumores cerebrales, y algunos pueden ser cancerosos.

Si una persona también experimenta dolores de cabeza, convulsiones, somnolencia o pérdida de conciencia, problemas de visión, cambios de personalidad u otros síntomas que puedan ser neurológicos y que no coincidan con ninguna otra afección de salud conocida, debe acudir al médico.

¿Se puede observar la artritis reumatoide en una resonancia magnética cerebral?

Según las investigaciones, alrededor del 40 por ciento de las personas con artritis reumatoide grave pueden sufrir una fractura entre el cráneo y las vértebras cervicales. En algunos casos, esto puede provocar una leptomeningitis, que es una inflamación del cerebro.

En el caso de esta afección grave, es necesario realizar una resonancia magnética para obtener un diagnóstico completo. Además, una resonancia magnética también puede mostrar lesiones cerebrales, que son más comúnmente el resultado de otros trastornos asociados con la bruma mental, como el lupus o el síndrome de Sjögren.

La artritis reumatoide provoca una inflamación crónica. Además de sus efectos en las articulaciones, la artritis reumatoide puede causar bruma mental, que puede implicar dificultad para concentrarse, mala memoria o pensamientos confusos.

La artritis reumatoide es una enfermedad degenerativa, lo que significa que tiende a empeorar con el tiempo y con la edad si no se trata correctamente. Sin embargo, hay tratamientos para prevenir o retrasar la progresión de la artritis reumatoide y controlar los síntomas.

Con el tratamiento y la modificación al estilo de vida, una persona con artritis reumatoide puede controlar y limitar la bruma mental.

Traducción al español por HolaDoctor.

Edición en español el 3 de junio de 2022.

Versión original escrita el 1 de marzo de 2022.

Última revisión médica realizada el 1 de marzo de 2022.