La piel sensible es un problema común, pero no es un diagnóstico médico en sí mismo. El término se refiere generalmente a la piel que es más propensa a la inflamación. La causa de la inflamación puede variar en cada persona.

Las personas con piel generalmente sensible tienen reacciones locales a las sustancias químicas, los tintes y las fragancias presentes en los productos que entran en contacto con su piel.

También pueden aparecer sarpullidos o irritaciones por la ropa o la fricción. Algunas personas son alérgicas a ciertas sustancias, las cuales pueden reaccionar en su piel.

La piel sensible también puede ser un síntoma de una afección subyacente. Encontrar formas de evitar los posibles desencadenantes y calmar la piel irritada puede ayudar a las personas con piel sensible a encontrar alivio y mejorar su calidad de vida.

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Eva Katalin/Getty Images

El tratamiento de la piel sensible suele implicar la búsqueda y eliminación de los factores desencadenantes, así como el uso de remedios caseros o medicamentos recetados para tratar los síntomas:

Tratamientos médicos

Dependiendo de la causa de la piel sensible y los síntomas asociados, los médicos pueden recetar algunos medicamentos diferentes. Estos incluyen:

  • Cremas con esteroides: Las cremas con esteroides, tanto de venta libre como con receta, como la hidrocortisona, pueden ayudar a aliviar la inflamación y la picazón. Estas cremas no se deben utilizar en la cara.
  • Cremas analgésicas: Las cremas anestésicas pueden ayudar a reducir la picazón, pudiendo hacer que la persona sea menos propensa a rascarse o irritar la zona.
  • Antihistamínicos: Tomar un antihistamínico oral, como la difenhidramina (Benadryl), puede ayudar con algunas reacciones alérgicas.
  • Protector solar: Un protector solar de amplio espectro con un factor de protección solar (FPS) de 30 o superior puede ayudar a proteger la piel sensible de los rayos ultravioleta (UV).

Remedios caseros y prevención

Algunos remedios caseros también pueden ayudar a tratar o prevenir los síntomas de la piel sensible. Estos incluyen:

Humectantes

Las cremas y lociones hidratantes hipoalergénicas pueden reducir la sequedad sin irritar la piel sensible. Algunos ingredientes pueden funcionar mejor que otros, dependiendo del tipo de sensibilidad.

Por ejemplo, las personas con piel muy seca pueden responder bien a ingredientes como la urea o el ácido láctico.

Algunos aceites simples, como la manteca de karité o el aceite de coco, pueden funcionar mejor para otras. Siempre es importante probar un producto en una pequeña zona de la piel antes de aplicarlo en el resto de la piel afectada.

Avena

La avena puede ser especialmente útil para las personas con piel sensible. Las investigaciones demuestran que la aplicación de avena coloidal en la piel puede ayudar con síntomas como las erupciones, la piel seca y el eczema.

La avena es efectiva ya que mejora la barrera de la piel en lugar de simplemente tratar los síntomas. Aplicar una pasta de avena coloidal sobre la piel sensible puede ayudar a controlar los síntomas.

Otros consejos

Las personas con piel sensible también pueden minimizar sus síntomas al:

  • tomar duchas y baños más cortos que duren menos de 10 minutos
  • evitar el uso de agua muy caliente para bañarse y lavarse las manos
  • evitar fragancias fuertes, detergentes u otros productos químicos
  • usar productos hipoalergénicos y sin perfume, como jabones, desodorantes y detergentes
  • evitar los limpiadores químicos fuertes
  • secar el cuerpo con palmaditas en lugar de frotarlo
  • probar los nuevos productos en una pequeña zona de la piel antes de aplicarlos en áreas más extensas

Una persona puede llevar un diario de los productos que utiliza cada día para ayudarle a identificar cualquier posible desencadenante de los síntomas en su piel. Si la persona encuentra un producto que cree que le causa una reacción, debe dejar de usarlo y llevarlo a su dermatólogo para que le haga pruebas de alergia.

En muchos casos, tener la piel sensible no suele ser motivo de preocupación, ya que probablemente se deba a una alergia menor o a una afección subyacente de la piel

Disposición natural

Si una persona tiene piel sensible sin ninguna afección subyacente, su piel puede irritarse más fácilmente.

Muchas personas experimentan irritación después de la exposición a:

  • la luz solar
  • vientos fuertes
  • temperaturas muy frías
  • temperaturas muy altas

Además, una persona con piel sensible puede ser más propensa a sufrir reacciones a los productos de cuidado de la piel, al maquillaje o a ciertos tipos de ropa.

Los síntomas de la piel sensible o reactiva pueden aparecer de numerosas maneras, entre ellas:

  • eczema
  • urticaria
  • manchas de enrojecimiento
  • sarpullidos que pueden picar, arder o quemar
  • picazón, escozor o ardor sin erupción visible
  • quemaduras solares

Dermatitis de contacto

La dermatitis de contacto se refiere a una reacción inflamatoria de la piel por contacto. Existen diferentes tipos de dermatitis de contacto.

Dermatitis irritante de contacto

Una persona puede contraer una dermatitis irritante de contacto por productos como jabones, detergentes para la ropa o incluso por la exposición al agua. Se produce una respuesta inflamatoria e inespecífica en la piel como reacción a las sustancias químicas de estos productos. Las personas también pueden reaccionar a las joyas fabricadas con metales como el níquel.

La piel puede enrojecerse, hincharse y picar. En algunos casos, puede resecarse mucho y agrietarse, e incluso pueden formarse ampollas.

La dermatitis fotoalérgica de contacto se produce cuando la piel se irrita tras entrar en contacto con algo después de exponerse a la luz solar, normalmente un producto como un protector solar.

Dermatitis alérgica de contacto

La dermatitis alérgica se produce cuando la piel de una persona entra en contacto con algo a lo que es alérgica. La alergia, que es una reacción inmunitaria, también puede provocar eczemas y urticaria.

Los alérgenos más comunes que pueden causar reacciones cutáneas son:

  • níquel
  • fragancias
  • látex o goma
  • tintes y colorantes
  • sustancias químicas o ingredientes en cremas o productos de baño y belleza
  • reacciones a ciertas plantas, como la hiedra venenosa, el roble venenoso o la ortiga

Los síntomas pueden incluir:

  • enrojecimiento con o sin hinchazón
  • sarpullidos o urticaria
  • piel seca y escamosa
  • ampollas o piel agrietada y supurante
  • manchas oscuras y correosas en la piel

Los síntomas pueden desaparecer solos si la persona elimina el producto problemático. Cualquier persona que tenga dificultades para identificar los productos que están causando sus síntomas debe acudir a un dermatólogo.

Piel seca

Una persona con piel seca también puede tener la piel sensible. La piel tiende a volverse más sensible al perder la humedad y la grasa protectoras que evitan que la piel se reseque.

La piel seca es más probable que aparezca en zonas expuestas a los elementos, como las manos, la cara y los brazos.

Tomar medidas para mantener la humedad en la piel puede ayudar a evitar que se reseque. El uso de lociones hidratantes y cremas faciales a diario puede ayudar a prevenir los síntomas.

Los afroamericanos deben tener especial cuidado con la hidratación de su piel, ya que las investigaciones muestran que su piel puede ser más susceptible a la pérdida de agua.

Eczema

El eczema, o dermatitis atópica, es una afección que generalmente provoca la aparición de parches de piel secos y con picazón, aunque los síntomas varían de una persona a otra.

Por lo general, el eczema se da en los niños, pero también puede darse en los adultos. Las zonas más comunes para los brotes de eczema son la cara, los codos, el cuello, las muñecas, los tobillos y las piernas.

Las personas tendrán erupciones en estas áreas que suelen causar picazón y tener bultos. En una piel más oscura, esto puede ser más difícil de ver.

Rosácea

Las personas con rosácea pueden tener la piel roja y vasos sanguíneos visibles, normalmente en la cara. En algunas personas, la piel puede desarrollar una erupción de pequeñas protuberancias llenas de pus.

La rosácea puede presentarse en diferentes tipos y causar diversos síntomas. Esto puede incluir enrojecimiento, rubor, ojos irritados e hinchados y erupciones que pueden parecer acné.

Fotodermatosis

La fotodermatosis es una reacción anormal a la luz solar dentro de la propia piel. En las personas con esta afección, los rayos UV de la luz solar pueden activar el sistema inmunitario sensible de la persona, provocando una reacción en la piel.

Una reacción a la luz solar en una persona con fotodermatosis puede provocar la aparición de erupciones, ampollas o manchas escamosas en la piel expuesta. La reacción empeora cuanto más tiempo se expone la piel a la luz del sol.

Es probable que la piel cubierta por la ropa, un sombrero o incluso las cubiertas para el cabello no presente síntomas.

Aunque los remedios pueden ayudar a calmar la irritación y otros síntomas de la piel sensible, la mejor manera de que una persona encuentre el origen de su sensibilidad cutánea es acudir a un dermatólogo.

Los dermatólogos pueden hacer pruebas en la piel y comprobar si hay posibles alergias o afecciones subyacentes. Conocer la causa de los síntomas suele facilitar su tratamiento.

Aunque es poco frecuente, es posible que una persona tenga una reacción alérgica grave a los productos para el cuidado de la piel, y que experimente anafilaxia. También es posible que un sarpullido sea un síntoma de alguna otra afección médica grave. Es importante buscar atención médica de emergencia para los síntomas preocupantes, incluyendo:

  • dificultad para respirar, sibilancias o jadeos
  • hinchazón en la cara, la lengua o la garganta
  • fiebre
  • sarpullido que cubre todo el cuerpo
  • mareos o debilidad
  • ampollas
  • señales de infección en la piel, como pus
  • una erupción dolorosa

Por lo general, tener la piel sensible no es una señal de una afección grave de la piel. Algunas personas son simplemente más sensibles a los productos que entran en contacto con su piel.

En muchos casos, evitar las sustancias químicas fuertes, los perfumes y otros ingredientes irritantes en los productos para el cuidado de la piel puede ayudar a aliviar los síntomas y mantenerlos alejados. Unos modestos tratamientos caseros pueden ayudar a calmar las erupciones o a minimizar las reacciones que las personas tienen a estos productos.

Cualquier persona que experimente síntomas persistentes o que empeoren debe acudir a un médico o dermatólogo para que le hagan pruebas. Puede haber una afección subyacente o una alergia que cause la reacción. Los médicos también pueden recomendar otros tratamientos.

Lee el artículo en inglés.

Traducción al español por HolaDoctor.

Edición en español el 23 de julio de 2022.

Versión original escrita el 28 de julio de 2021.

Última revisión médica realizada el 28 de julio de 2021.