La artritis reumatoide es un trastorno en el que el sistema inmunitario de una persona ataca sus articulaciones, provocando que se inflamen. ¿Cuáles son las primeras señales de esta afección?

Los síntomas de la artritis reumatoide (AR) suelen afectar las manos, muñecas y pies. La detección temprana de las señales de AR podría conducir a un diagnóstico temprano y al tratamiento adecuado.

El manejo temprano y constante de la artritis puede prevenir el daño articular y, a la larga, la discapacidad.

En este artículo exploramos las primeras señales y síntomas de la AR, sus factores de riesgo y cuándo consultar a un médico.

Rheumatoid arthritis in senior persons clasped hands.
La artritis reumatoide ocurre cuando las articulaciones se inflaman porque el sistema inmunitario de una persona no funciona correctamente.

Los principales síntomas de la AR son dolor y rigidez en las articulaciones. Antes de que se presenten estos síntomas, es posible experimentar algunas señales de advertencia tempranas.

Algunas de estas señales de advertencia tempranas se relacionan con lo que siente una persona en general, mientras que otras son específicas de las articulaciones. Es más probable que los síntomas que afectan las articulaciones de una persona indiquen la presencia de AR, particularmente si más de una articulación o ambos lados del cuerpo están afectados.

Detectar estas señales de advertencia puede ayudar a las personas a buscar tratamiento a la mayor brevedad posible. Las primeras señales de alerta de la AR incluyen:

1. Fatiga

Antes de experimentar cualquier otro síntoma, una persona con AR puede sentirse extremadamente cansada y sin energía. También podría sentirse deprimida.

La sensación de fatiga puede afectar:

  • las actividades cotidianas
  • las relaciones
  • el deseo sexual
  • la productividad en el trabajo

Sentirse fatigado puede deberse a la reacción del cuerpo a la inflamación de las articulaciones.

2. Fiebre leve

La inflamación asociada con la AR puede hacer que las personas se sientan mal y desarrollen fiebre. Pueden tener una temperatura ligeramente elevada, que es una señal temprana que a veces acompaña a la fatiga. Esto podría preceder a cualquier efecto notable en las articulaciones.

3. Pérdida de peso

Una tercera señal de alerta temprana de la AR es la pérdida de peso inexplicable, que posiblemente sea un efecto indirecto de la inflamación.

Cuando alguien se siente febril y fatigado, puede perder el apetito, lo que puede causar la pérdida de peso.

4. Rigidez

Stiff elbow joint causing pain.
La rigidez persistente, la sensibilidad y el dolor en las articulaciones pueden ser una señal temprana de artritis reumatoide.

Otra señal temprana de AR es la rigidez articular. La rigidez puede ocurrir en una o dos articulaciones menores, a menudo en los dedos. Puede aparecer lentamente, pero puede durar varios días.

Además de la rigidez que afecta a articulaciones específicas, una sensación general de rigidez en el cuerpo puede ser una señal temprana de AR.

Este tipo de rigidez suele afectar a una persona después de haber estado quieta durante mucho tiempo. Este síntoma es la causa de la rigidez matutina, un síntoma característico de los pacientes con AR.

5. Sensibilidad articular

La sensibilidad en las articulaciones que afecta las manos y los pies es una señal temprana típica de AR.

En las manos, se puede sentir sensibilidad al presionar la articulación en el medio y en la base de los dedos o durante el movimiento.

En los pies, las articulaciones en la base de los dedos pueden tener sensibilidad. Este dolor puede hacer que las personas caminen sobre sus talones o levanten los dedos de los pies al caminar.

6. Dolor de las articulaciones

El dolor articular en los dedos, las muñecas y los pies es una señal de AR. La inflamación hace que el revestimiento de la articulación se engrose y que también provoque la producción de líquido articular adicional.

Ambos factores ejercen presión sobre la cápsula que rodea la articulación e irritan las terminaciones nerviosas que contiene, provocando dolor.

7. Inflamación de la articulación

Las articulaciones que se ven hinchadas en las manos y los pies son una señal típica de AR. La inflamación de las articulaciones tiende a ser más evidente a medida que avanza la AR, pero una inflamación sutil puede ser una señal temprana.

8. Enrojecimiento de las articulaciones

La inflamación en las articulaciones puede darles una apariencia enrojecida. La decoloración de la piel alrededor de las articulaciones de las manos y los pies es una señal de AR.

El enrojecimiento ocurre porque la inflamación hace que los vasos sanguíneos de la piel circundante se ensanchen. Los vasos más anchos permiten que fluya más sangre hacia esta área, lo que le da a la piel una apariencia enrojecida.

9. Calor en las articulaciones

El calor en las articulaciones es causado por la inflamación y puede presentarse antes de que ocurra enrojecimiento o hinchazón. Esto puede ser una señal temprana de AR.

10. Entumecimiento y hormigueo

El entumecimiento y el hormigueo que afectan a las manos y los pies pueden ser una señal temprana de AR. Estos síntomas son causados por una inflamación en las articulaciones que puede causar compresión de los nervios, lo que resulta en pérdida de sensibilidad.

11. Disminución del rango de movimiento

En las primeras etapas de la AR, una persona puede notar que tiene problemas para mover la muñeca hacia adelante y hacia atrás.

A medida que la enfermedad avanza, el daño a las articulaciones puede afectar los ligamentos y tendones, lo que dificulta doblarlos y enderezarlos.

12. Afección en las articulaciones en ambos lados

Es común que las personas afectadas por AR experimenten síntomas en las mismas articulaciones en ambos lados del cuerpo. Si bien esta simetría es habitual, no es el caso de todas las personas con la afección.

La AR es el resultado de un problema con el sistema inmunitario. Un sistema inmunitario sano ayuda a combatir las infecciones. En las personas con AR, el sistema inmunitario ataca por error las células del revestimiento de la articulación, lo que provoca que se inflamen, se pongan rígidas y duelan.

Las personas que tienen AR tendrán algunos períodos en los que no experimentan síntomas y otros momentos en los que los síntomas se agravan.

Actualmente, no existe cura para la AR, pero el tratamiento adecuado y el ejercicio moderado pueden ayudar a reducir los brotes. Si la AR no se trata, las articulaciones, el cartílago y los huesos de las áreas afectadas pueden llegar a dañarse.

Senior woman talking to osteopath and chiropractor, pointing to model of skeleton to describe her pain.
Es importante informar a un médico o profesional médico cuando los síntomas de la AR cambian o empeoran, ya que puede ser una señal de que se están desarrollando complicaciones.

Si no se trata, la AR puede dañar las articulaciones, el cartílago circundante y los huesos cercanos, lo que lleva a deformidades en las articulaciones.

También puede provocar el desarrollo de bultos firmes en las articulaciones o cerca de ellas, llamados nódulos reumatoides. Estos nódulos son una característica visual que suele asociarse con la afección.

Además de las deformidades articulares y los nódulos reumatoides, la AR también puede provocar:

  • síndrome del túnel carpiano
  • inflamación en otras áreas del cuerpo, incluidos los ojos, el corazón y los pulmones
  • mayor riesgo de ataque cardíaco y derrame cerebral

Los médicos no saben qué desencadena que el sistema inmunitario ataque las articulaciones del cuerpo de las personas con AR.

Sin embargo, hay algunos factores que los investigadores saben que aumentan el riesgo de verse afectado por la afección:

  • Sexo: las mujeres corren un mayor riesgo de desarrollar AR que los hombres. Un estudio de 2011 encontró que 1 de cada 12 mujeres y 1 de cada 20 hombres desarrollan AR a lo largo de su vida.
  • Fumar: según un estudio de 2009, existe fuerte evidencia de que fumar aumenta el riesgo de desarrollar AR, además hace que progrese más rápidamente.
  • Tener sobrepeso: un estudio de 2016 encontró un vínculo entre la obesidad y un riesgo ligeramente mayor de desarrollar AR.

También hay algunos factores que los investigadores han descubierto que disminuyen el riesgo de AR. Entre ellos:

  • Consumo moderado de alcohol: un estudio de 2012 encontró que el consumo moderado de alcohol se relaciona con un riesgo reducido de AR.
  • Lactancia materna: según un estudio de 2014, las mujeres que amamantan tienen un riesgo reducido de desarrollar AR.

Una persona que experimente las primeras señales y síntomas de la AR debe ir al médico. Un médico puede ayudar a diagnosticar la afección y recomendar el tratamiento adecuado.

El diagnóstico y el tratamiento tempranos de la artritis reumatoide reducen la probabilidad de sufrir complicaciones por esta enfermedad.

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